Prométeme ❣️
Siento las cosquillas incendiando mis brazos.
Me siento con ellas el tiempo que me lo piden.
Cierro los ojos para encontrar las palabras que tratan de entregarme.
Pero las palabras no se reciben: se escriben.
O más bien: escribirlas es la forma de recibirlas.
Hoy sé de qué quiero escribir, a diferencia de otras tantas veces, pero no sé cómo hacerlo.
Sé qué quiero pedirles que me prometan, pero no sé cómo pedírselos.
Así que solo empiezo, porque como siempre les digo, sabremos cuando empecemos.
Y así que solo lo digo, tal cual está en mi mente.
Esta es la promesa, o la antesala de la misma:
No quiero que seas el tipo de persona que escucha algo interesante y no pregunta más.
Esto me pasó el fin de semana.
Frente a una respuesta muy interesante, alguien simplemente asintió y continuó con la ronda de preguntas.
Y se quedó, se quedó, se quedó dando vueltas esa situación en mi mente, esa mirada de esa persona que sé que tuvo que haber sentido algo con la respuesta, porque sus ojos hablaron por ella, pero no preguntó nada más.
Y se quedó, se quedó esa situación, esa mirada, esa falta de preguntas, conmigo, hasta hoy, hasta ayer que supe que hoy iba a escribir sobre esto, hasta este momento en que me siento a escribirlo.
No quiero que seas el tipo de persona que escucha algo interesante y no pregunta más.
Quiero que ante cada respuesta interesante que alguien te entregue en tu vida, o ante cada respuesta desconocida, ajena a lo conocido para ti, ajena a tu mundo, a tus días, a tus ojos, y que tiene la potencialidad de entregarte algo distinto, tú respondas:
WOW. ¿Cómo así?
WOW. Cuéntame más.
WOW. No entiendo nada.
WOW. ¿Y eso cómo funciona?
Prométeme que ante cada palabra que sacuda tu mundo, que remueva tu mente, que le hable a tu corazón, tú vas a preguntar algo de vuelta.
No porque haya algo mal contigo si no preguntas.
No porque haya algo mal con el silencio.
Pero porque este tipo de silencio, el que no dialoga con la vida, apaga el fuego que la mantiene viva.
Que nos mantiene vivos.
Y yo quiero que nuestras vidas, estén llenas de vida, y que esa vida, esté llena de fuego, de ese fuego que incendia nuestros brazos.
Es decir,
nuestras mentes
nuestros corazones
nuestras tierras
nuestros “yo soy”.
Prométeme.
“Prométeme que serás libre.
Que vas a decir adiós cuando no haya motivos para quedarte.
Pero que vas a encontrar esos motivos,
cuando sabes que aún existen.
Prométeme que le darás una oportunidad al tiempo,
pero que sabrás distinguir,
cuándo es demasiado tarde,
o demasiado pronto.
Prométeme que las estrellas nunca te parecerán muy chicas,
ni muy lejanas.
Prométeme que le darás una oportunidad al espacio que no existe todavía.
Prométeme que conocerás tu dolor antes de permitirle partir.
Y que le dirás adiós con los brazos abiertos,
así como lo recibiste.
Prométeme que recordarás que un día vas a morir.
Pero que cada día,
mientras sigas viviendo,
sabrás que ese día no ha llegado.
Prométeme que serás libre.
Aunque no sepas que ya lo eres.”
- Lo que queda después del sol, LRR
“Prométeme que no vas a gastar tanto tiempo pedaleando en el agua tratando de mantener tu cabeza sobre las olas que olvides, realmente olvides, lo mucho que siempre has amado nadar.”
- Autor desconocido
“Espero que nunca pierdas tu sentido del asombro.
Que te sacies al comer pero que siempre mantengas esa hambre.
Que nunca des un solo respiro por sentado.
Dios no permita que el amor te deje con las manos vacías.
Espero que todavía te sientas pequeño cuando te pares al frente del océano.
Que cada vez que una puerta se cierre, otra más se abra.
Prométeme que le darás a la fe una oportunidad.
Y que cuando tengas la opción de quedarte sentada o bailar.
¡ESPERO QUE BAILES!”
- I hope you dance, Lee Ann Womack
Prométeme que ante cada palabra que sacuda tu mundo, que remueva tu mente, que le hable a tu corazón,
tú vas a preguntar algo de vuelta.
Prométeme que serás libre.
Prométeme que vas a recordar lo mucho que amas nadar.
Prométeme que le darás a la fe una oportunidad.
Prométeme que vas a bailar.
¿Prometido?