Valentía & Abundancia 💫
¿Sabían que el año pasado, tras UNA SOLA CITA, es decir, tras verme una sola vez en mi vida con una persona, decidí tomar un avión y vivir con él durante 24 días al otro lado del mundo?
Sí. Esta partecita de la historia no se las había contado.
El año pasado les conté que me había enamorado, que estaba viviendo una historia de amor muy linda.
No les conté esa historia cómo se vio.
Así se vio.
Nos conocimos, al otro día yo me iba para un paseo, el día que yo volvía del paseo él se iba de viaje durante 3 meses.
Nos vimos una sola vez y empezamos una relación a distancia.
Decidimos que yo podía viajar para encontrarme con él.
Eso hice.
¿Por qué les estoy contando esto?
Para hablarles de varias cosas.
Primero, la valentía que una decisión como esa requiere.
Everything you want is on the other side of fear.
Todo lo que anhelas está del otro lado del miedo.
Pero antes de generar esa valentía dentro de mí, aparecían especialmente dos preguntas en mi mente:
¿Y si no funciona?
Pues ese es el “peor” escenario posible, y en últimas no es tan horrible.
Si no funciona, y si la cosa está muy horrible, cojo un avión y me devuelvo.
O continúo con mi viaje sola.
¿Y la plata?
Era un viaje primero a USA, después a Europa.
Muchos tiquetes, estadías, comida. Plata.
En ese momento no me había conectado con la frecuencia de la abundancia que hoy estoy viviendo.
No tenía la plata para todos los gastos que sabía que el viaje implicaba.
Pensé: bueno, como último recurso mi mamá me puede hacer un préstamo (ella misma me incentivó y me lo propuso).
Pero aun contando con esa opción, la plata seguía siendo lo más me frenaba.
Estaba casi segura de que iba a necesitar ese préstamo, no quería, me asustaba tener esa deuda, pero decidí ir, y después hacer cuentas.
Tenía la plata para los primeros tiquetes y un poco más.
¿Y saben qué es lo más loco?
Primero, en la primera parte del viaje (USA), esa persona se ocupó de todos los gastos por mí.
Segundo, estando en USA, apareció una oportunidad de trabajo que me generó exactamente todos los recursos que luego me gasté en Europa (y que no tenía antes de viajar).
No necesité el préstamo de mi mamá.
Gracias a ese trabajo, a ese ingreso completamente inesperado, y completamente exacto, pude pagar todo el viaje con la plata que ya tenía.
Hago énfasis en esto porque este es el nuevo paradigma en cuanto a nuestra relación con los recursos, con la plata:
La podemos generar de formas que ni nos imaginamos, de formas que no son predecibles, de manera mágica.
Pero para eso, sí o sí, la confianza va primero.
Me abro, me atrevo, confío, doy pasos distintos, le digo “sí” a la vida, y la vida responde.
Pero ojo, muy importante:
Nos abrimos, nos atrevemos, confiamos, y damos esos pasos, SIN esperar que la vida responda.
Sin aferrarnos a un resultado.
“Invierto, o tomo esta decisión valiente porque la vida me va a recompensar, porque algo me va a entregar”.
NO.
Lo hacemos CON INDEPENDENCIA del resultado, sin tener nuestra mente en el resultado, y ahí es donde la magia ocurre.
Después de ese viaje mágico, decidimos no seguir juntos, pero esa decisión valiente me entregó una de las amistades más increíbles de mi vida.
Y me entregó la evidencia de la forma en que la abundancia puede hacerse presente en nuestras vidas, si lo permitimos.
¿Lo permitimos?
PD. Viene Valentía Mastermind, para calibrarnos a esta energía de la abundancia, de la valentía, y para revolucionar nuestra existencia ❤️🔥
PDD. Mis mujeres de Cumplirnos, recuerden el beneficio extra que tienen hasta el 11 de agosto por estar dentro ⚡️
