Hoy en retrospectiva, voy entendiendo por qué mi fondo de pantalla, desde que tengo este computador, desde hace tal vez 5 años, es una flor cósmica, una flor galáctica, una mezcla de flor con estrellas, con origen, con lo que no podemos ver.
Hoy en retrospectiva, voy entendiendo por qué en junio del 2022, más o menos, se despertó, se ancló, recordé, mi amor por las rosas.
Hoy en retrospectiva, voy entendiendo por qué una de las películas más llenas de latidos para mí, en mi infancia, fue Spirit, y por qué los nombres de mis animales (mi perro, mi caballo) eran nombres asociados a un cielo furioso (Trueno, Tempestad).
Hoy en retrospectiva, voy entendiendo por qué me tatué, hace tantos años ya, un nueve, un árbol con un columpio, una frase sobre las utopías, un corazón latiendo.
Hoy en retrospectiva, voy entendiendo por qué un día decidí crear una cuenta de Instagram, un 11 de enero de un 2017.
Y sobre esto último.
Lo que he ido entendiendo, es que el mundo, y el propósito, me necesitaban afuera: sin esconderme, compartiendo mis letras, mi cara, mi voz, mis latidos, lo que he decidido aprender, lo que he ido aprendiendo sin decidirlo (conscientemente).
Luego fui entendiendo, que el mundo, y el propósito, me necesitaban no solo afuera, sin esconderme, sino sin achiquitarme.
Porque.
Cuando te escondes, impides que tus personas te encuentren.
Cuando te achiquitas, impides que tus personas te reconozcan.
Y he ido entendiendo, que el mundo, y el propósito, me necesitaban afuera, sin esconderme, sin achiquitarme, decidiendo poner lo que me habita al servicio de ese mundo, de ese propósito, de la creación, para reconocer el potencial inmenso que me habita, y así poder acompañar a otras personas, a reconocer el suyo propio, también.
El mundo, y el propósito, me necesitaban afuera, gracias a esa cuenta de Instagram, gracias a aquello en lo que se ha convertido (mi emprendimiento, mi trabajo, mi forma de servir), para darle vida a mis contra todo pronóstico, y así poder vivir una vida llena de tiempo, y de libertad, para hacer lo que estamos aquí para hacer:
Aprender, enseñar y disfrutar.
Y gracias a la vida, por eso.
Y a mí, por decidirlo 🌞
*
Mañana empezamos Catalyst. Nuestro segundo grupo de Catalizadoras.
Si has decidido dejar de esconderte, dejar de achiquitarte, poner al servicio del mundo, del propósito, de la creación, lo que te habita, tus extrañas joyas cultas, tus latidos.
Si has decidido dejar de esperar, porque para mañana es tarde (aunque en realidad, pensando en Catalyst, para mañana es justo a tiempo, porque mañana 30 de agosto empezamos).
Si has decidido que estás lista para el baile, para permanecer muy montada en el tren, para aprender de quien ya lo hizo, lo hace, lo sigue haciendo.
Si estás lista para expandir la forma en la que creas, en la que vives, en la que piensas, en la que compartes.
Si estás lista para ir al encuentro de esos caballos que te están buscando de vuelta.
Nos vemos del mismo lado.
Toda la info de Catalyst aquí 🌞
A por esa Catalización hacia lo inmenso que nos espera.