Ayer terminé de leer la obra literaria de María Luisa Bombal; chilena, poeta, géminis.
Llegué a la librería a comprar libros, miré solo los libros de ciertas editoriales porque estaban en descuento, y como no había el exceso de oferta al ser una selección reducida, me encontré con el de María Luisa, que nadie me había recomendado antes.
A mí suele darme miedo comprar libros sin recomendación, porque la mayoría de veces me ha ido mal, pero igual me sigo arriesgando, y a veces la vida recompensa mi valentía, con extrañas joyas ocultas, como fue el caso con esta.
Leí la contraportada, que les transcribo aquí, y no hubo duda de que tenía que leerla:
Admirada por Borges, Carlos Fuentes, Gabriel García Márquez, María Luisa Bombal es considerada la madre del realismo mágico, y una reconocida influencia en Juan Rulfo. Y, sin embargo, como otras mujeres que formaron parte del boom latinoamericano, quedó invisibilizada por sus compañeros escritores. Dueña de una vida y obra fascinantes, su literatura abraza lo realista y lo sobrenatural para explorar el mundo interior femenino, especialmente el deseo, en el contexto de la sociedad patriarcal de su tiempo.
Y sin embargo, ya sin duda de que tenía que leerla, compré el libro con reservas, porque temía encontrarme con una escritura arcaica y compleja, como suele ser el caso con tantos grandes, con tantos clásicos, que definitivamente no son los míos.
Y sin embargo, cómo no darle el chance, a esa mujer aparentemente madre de todo, si le he dado el chance a tantos otros? Repito: no había chance de no dárselo.
Y al terminar de leerla (de devorarla, porque no pude parar), aquí mi Oda, aquí mis gracias:
Oda a María Luisa Bombal
María Luisa Bombal es nuestro origen.
El origen de quienes escribimos. El origen de las poetas vivas. Y pensamos que el origen son los genios de Gabo, Rulfo y demás escritores del boom latinoamericano (genios, lo son, y me han sacudido el alma entera, y les debo tanta vida).
Pero ella es la genia original. Ahora entiendo por qué existieron ellos. Y sigo sin entender, cómo es que no la conocía a ella.
De María Luisa emana todo; los relámpagos para los que encuentra tantas palabras distintas, sin agotarlas (¿cómo lo hace?), las luciérnagas que guían los caminos, las algas, las islas fangosas, las raíces mojadas, los pájaros húmedos, las bellezas imposibles, la niebla que convierte cualquier lugar en un silencio.
De ella emana lo real convertido en poesía, la vida convertida en un hechizo imposible, todas las imposibilidades juntas.
De ella emanan Rulfo, Gabo, y los otros tantos genios que no son los míos, tal vez por desconocimiento, por azar, o por complejidad.
En su escritura se delatan los tiempos de antaño, lo viejo, no lo niego. Y sin embargo. Su escritura se lee, se entiende, se goza.
Estremece, aunque no compartamos siglo, enciende todas las terminaciones nerviosas, se roba los latidos que el corazón se salta porque lo detiene, con cada línea, con cada frase, con cada escrito suyo, que es poesía arrancada de la tierra, que es la tierra convertida en páginas, que es todo lo que late como ese inmenso reloj invisible, en la casa de María Griselda, ella, María Griselda, el origen de Remedios la bella, el origen de Rosa con su pelo verde, el origen de todas quienes vinieron después.
Solo que algo la sacó de escena, a María Luisa Bombal, a la poeta de poetas, a nuestro origen:
Ser mujer.
María Luisa contó con la pésima suerte de nacer mujer. Escritora genia y origen, pero mujer primero y ante todo.
Así que María Luisa; hoy somos nosotras quienes nos encargamos de dar a conocer tu nombre, tu libro, con sus dos novelas, y tus cinco cuentos. Hoy somos nosotras, quienes finalmente sabemos, que tú, viniste primero. Antes que todos. Madre de la tierra.
María Luisa: quienes escribimos cargamos con tu legado en nuestras manos, o intentamos, que así sea.
María Luisa: nosotras somos las poetas vivas, porque exististe tú primero. Porque te sentimos allá tan lejos, aquí tan cerca. Porque te encargaste, de dejarnos un pedazo tuyo. De mojar la tierra, para que algo distinto creciera en la nuestra. Y por eso, hoy te decimos, gracias.
*
Les voy a dejar un post en mi insta (creo que hoy por la tarde) con algunos apartes resaltados (DE TANTOS. DE TODO EL LIBRO RESALTADO). Y quiero hacer la anotación, de que no es una lectura para todo el mundo, no es para no-lectores, es solo para las empedernidas, para las devoradoras, para las tormentas, para las poetas, y ojalá, para los poetas, para los hombres, que se atreven a leer y amar a las mujeres, que escriben, que escribieron antes, que nos gestaron.
Para cerrar.
María Luisa Bombal es Valentía. Y las puertas para VALENTÍA, abren este domingo 1 de octubre, con precio especial durante 48 horas. Wait for it.
¿Que es esta joya que encontraste?Jamás había oído de ella, y eso hace que las ganas de leerla sean mayores. Que ilusión gestaste con estas palabras Luisa.